jueves, 14 de mayo de 2009

SOLUCIONES SIMPLES EN EL CONTROL DEL PIETÍN

UN RIESGO PARA TENER EN CUENTA

El conjunto de afecciones podales más conocido como "pietín" generan en el tambo una importante pérdida económica.

Junto con la mastitis y las enfermedades reproductivas, el pietín se encuentra dentro de las tres enfermedades de mayor impacto económico en la explotación lechera. Cada vez que el animal apoya el pie en el suelo sufre la presión del peso de su cuerpo en la parte ósea, las articulaciones y el estuche corneo del mismo.

Los animales con afecciones podales ven comprometida seriamente su producción, pues disminuye su rango social conjuntamente con su nivel nutricional. Disminuyen los litros de producción diaria, su estado corporal y en casos graves no se preñan por anestro.

CUÁNDO, CÓMO Y POR QUÉ APARECE EL PIETÍN

La época del año donde se encuentran mayores casos de pietín es en el fin del verano y comienzo de otoño, aunque puedan manifestarse altas prevalencias a lo largo del invierno, sobretodo si se extiende el período de lluvias.

Los campos encharcados y con superficies barrosas son factores que predisponen a un futuro contagio, ya que el casco protector del pie se ablanda y ante cualquier lesión queda expuesto a un ambiente con un alto riesgo de infección.

Los accesos mejorados con piedras son otro factor de riesgo ya que es muy común ver animales con pequeños trozos de piedra en el espacio interdigital.

CUANDO RENQUEA YA ES TARDE

La producción de leche baja significativamente en los animales con pietín, dependiendo del avance de la enfermedad. En caso de ser detectada la enfermedad dentro de las 48 horas sólo baja un 1 %, si no se detecta a tiempo, la producción puede bajar entre un 20 y un 50 %.

Al igual que otras enfermedades las pérdidas ocasionadas por casos clínicos son mucho mayores que los costos de un buen programa de prevención.

Si se detecta el animal con una pequeña llaga o una dermatitis incipiente es muy fácil curar y no se generan prácticamente pérdidas de producción.

A un animal rengo y con una fuerte infección en su pie hay que practicarle cirugía y tratamiento con antibióticos incrementándose significativamente los costos.

La disminución de factores que predisponen a la enfermedad (carencias de minerales y desequilibrios en la nutrición) y el correcto uso de pediluvios y rociado de pezuñas con formulaciones especiales, dan excelente resultado en la disminución de las pérdidas ocasionadas por producción, reproducción o descarte.

DE DÓNDE VIENE EL PROBLEMA

Los factores causantes del pietín son de distinto origen, pero los podemos agrupar del siguiente modo:

Causas nutricionales: altos y bruscos suministro de hidratos de carbono en la dieta trae como consecuencia acidosis láctica en el rumen generando muerte de bacterias gram negativas y liberación de endotoxinas que dañan los vasos sanguíneos del pie dando como resultado edemas y hemorragias en los tejidos que se encuentran por debajo del estuche córneo.

Carencias de minerales: la carencia de Cobre o Zinc tiene importancia en, la salud de los tejidos y vasos sanguíneos del pie, deteriorando la resistencia de los mismos.

Agua de bebida: la presencia de sulfatos en el agua por encima de 400 ppm impide la normal absorción de zinc y cobre.

Genéticos: malos aplomos y predisposiciones hereditarias.

Climáticas: exceso de humedad y barro.

Infecciosas: el 90 % de las afecciones podales cursan con presencia de gérmenes infecciosos que generalmente se encuentran en el suelo y contaminan rápidamente las heridas.

CONOCIENDO EL PROBLEMA

Hay varias formas de clasificar la enfermedad, pero cualquiera sea dicha clasificación los síntomas clínicos coinciden en su gran mayoría: pérdidas de funcionalidad, renquera o claudicación, gran inflamación local, dolor y ulceraciones en algunos casos.

Algunas patologías que se agrupan bajo la generalización de "pietín" pueden ser las siguientes.

Dermatitis interdigital: tiene su origen en condiciones de humedad con presunta base infecciosa que afecta al espacio entre los dedos.

Pododermatitis séptica: es producida por un elemento que perfora la capa córnea y desarrolla una infección generalizada en el pie.

Infosura o laminitas: es producida indirectamente por problemas digestivos que afectan los vasos sanguíneos y la circulación del pie. Una de las causas es el estrés alimentario. Se manifiesta con calor y dolor en los dedos, depresión generalizada y malformación en la pezuña. Si bien este síntoma no tiene origen séptico cuando estas pequeñas arterias y venas se dañan, la producción de tejido córneo se debilita y se vuelve más vulnerable a las agresiones mecánicas y a la invasión bacteriana. Es por esto que la infosura es un factor predisponerte para posteriores infecciones de origen séptico.

Úlcera de suela: tiene origen infeccioso. Es una reacción de la suela en la región de unión con el talón, que se manifiesta fundamentalmente en las vacas lecheras.

 

Pie con ulceraciones de suela.

COMO COMBATIR LOS PROBLEMAS

Al igual que la mastitis, las afecciones podales no son solamente enfermedades biológicas, sino que también son económicas. Lo que caracteriza este tipo de enfermedades son las fenomenales pérdidas de dinero que producen cuando aparecen.

Estas enfermedades no afectan a un solo animal sino que comprometen la producción de todo el rodeo.

Por todo lo dicho nuestra estrategia de control va a estar centrada en las medidas de prevención, control de nuevos casos y curación de casos incipientes.

Para el control de casos avanzados, el tratamiento individual y la aplicación de antibióticos es necesaria la actuación profesional correspondiente.

MEDIDAS PREVENTIVAS

Tratamiento con zinc y cobre: pueden darse como suplemento en la dieta del animal en forma de bloques para lamer o vía inyectable subcutánea.

Desvasado preventivo: debe hacerlo un profesional al menos una vez al año, luego del secado del animal.

Pediluvios: Son baños terapéuticos que se aplican a los animales y consiste en cubrir los dedos del animal con líquidos medicados.

Los pediluvios bien utilizados son una excelente herramienta en el control del pietín, ya que impedimos que las vacas sanas se enfermen y logramos curar las que están con una infección incipiente.

Antiguamente los pediluvios se construían con un volumen muy grande de agua, pues debía medicarse con formol y sulfato de cobre dejando los animales dentro de los mismos alrededor de 10 minutos. Además la solución de formol permanece activa unas pocas horas y sólo sirve para un día de tratamiento. La volatibilidad del formol hace muy inestable la solución en presencia de materia orgánica emitiendo peligrosos gases tóxicos de efectos cancerígenos.

APLICACIONES DIRECTAS

Con la aparición en el mercado de formulaciones específicas para el tratamiento de afecciones podales se consigue hacer más eficiente todo el sistema de prevención. Estas formulaciones combinan desinfectantes como cloruro de benzalconio y glutaraldehido con sulfatos y tensioactivos catiónicos logrando una solución con mayor capacidad curativa, persistencia y longevidad, posibilitando 2 ó más días de tratamiento con la misma solución.

Algunas formulaciones específicas como Podocur (Hypred) vienen preparadas para una doble modalidad de aplicación, en pediluvio como solución y dentro de la fosa con pulverizador aplicando el producto puro sobre las pezuñas.

Los mejores resultados se consiguen cuando se combinan las dos modalidades. De esta manera realizamos un trabajo preventivo con el pediluvio y con el pulverizador curamos los casos clínicos incipientes, logrando incidencias de la enfermedad menores al 5 %.

Algunas otras ventajas son las siguientes:

         Aumentan los índices de prevención y curación disminuyendo la aparición de nuevos casos clínicos

         Disminuye la cantidad de agua utilizada en la preparación de los pediluvios.

         Aumenta la cantidad de tratamientos efectuados con una misma preparación disminuyendo el costo unitario de los mismos.

         Una rutina de tratamiento con formulados específicos tiene un costo de un 40 % menos que una realizada con formol y sulfato de cobre, realizando un mayor porcentaje de curación en heridas y tejidos infectados.

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